Luego de años de crisis el sector privado y el gobierno, están avanzando para recuperar a la fruticultura argentina. Los resultados no se verán inmediatamente, menos aún en este año en el cual una superproducción de peras, manzanas y limones en Europa, limitó las exportaciones a dicho destino. Esto llevará a una menor exportación global, dado que la merma de Europa no podrá ser compensada por los mayores envíos a otros destinos.
No hay duda que le sector frutícola argentino sufrió en la última década bajo una profunda crisis. El país con mayor tradicción frutícola en el hemisferio sur y que lideró el comercio austral tuvo que enfrentarse a una política interna adversa, que se sumó a una falta de estratégica común del sector
Todo esto llevó a un fuerte achicamiento que se visualiza claramente en el derrumbe de las exportaciones. De exportar 1,2-1,5 millones de toneladas, se pasó a prácticamente la mitad, 750-850 mil tonealdas. De tener un ingreso de más de 1.000 millones de dólares, se pasó a 800 millones U$. Cuando asumió el actual gobierno hubo un cambio de política, acercándose a las producciones
frutícolas e implementando algunas mejoras. Por otro lado se impulsó al comercio exterior.
Gracias a este esfuerzo se logró abrir nuevos mercados y mejorar las condiciones de acceso a otros.
Actualmente más frutas argentinas pueden ingresar a países como los EEUU, Méjico, Brasil o India. Estas medidas ayudaron a frenar la tendencia negativa, pero no fueron suficientes para lograr una real recuperación. Las exportaciones dejaron de caer, se estabilizaron en un nivel bajo, pero no crecieron.
En las últimas semanas se observan claras señales del gobierno y los privados, de darle un nuevo impulso a la fruticultura. Por un lado el gobierno busca aliviar la presión impositiva e impulsar medidas para reducir al elevado “costo argentino”. Además se continúa con la apertura de los mercados. El acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea llevará a que dentro de algunos años, volvamos a poder acceder a dicho continente bajo las mismas condiciones que nuestros competidores. También se continúa negociando con varios países asíaticos, para lograr un mejor acceso a dicha región.
Por otro lado los privados formaron el “Comité Frutas de Argentina”, una asociación que reune las principales camaras de productores y exportadores: Federcitrus (cítricos), CAFI (manzanas y peras), ABC (arándanos) y CAPCI (cerezas). Se busca plantear al gobierno en forma conjunta las problemáticas del sector, realizar propuesta, plantear posibles soluciones y coordinar acciones.
Cambios en la Exportación de Frutas – últimos 10 años
Ranking: en los últimos 10 años el ranking se mantuvo bastante similar.
o Según volúmen: pera – limón – manzana – naranja – mandarina – arándano – uva o Según valor: pera –limón – arándano – cereza – manzana – mandarina – naranja
Mayor importancia Pera-Limón: hace 10 años aportaban el 50% de las exportaciones, actualmente lo hacen en más del 70%. Esto se debe a que cayeron marcadamente las exportaciones de las otras frutas.
Limón: Sus volúmenes exportados se redujeron solo levemente, fue de las frutas que menos redujo sus exportaciones.
Pera, Manzana, Cítricos dulces: redujeron a la mitad sus exportaciones (en volúmen).
Mandarina: cayeron marcadamente sus exportaciones, por lo cual en algunos años su ingreso es inferior al de la naranja.
Cereza: creció fuertmente en los dos últimos años. Ante su gran valor logró ubicarse en el cuarto y hasta tercer lugar del ranking del valor.
Uva: hace 10 años se ubicaba por encima del arándano (en volúmen), pero fue la fruta que
más redujo su exportación.
Caída y casi desaparición de la exportacion de frutas menores: se dejó de exportar o se hace en volúmenes muy pequeños a frutas como las ciruelas, duraznos o pomelos.
Valor vs Volúmen: lo que más se redujo fue el volúmen exportado. Este se redujo a prácticamente la mitad. El valor total también se redujo, ante los menores volúmenes exportados; pero en forma menos marcada, dado que se empezó a exportar fruta de mayor valor unitario.
Cambios en los destinos
Unión Europea: Fue originalmente nuestro principal destino, recibiendo 2/3 de nuestros
envíos. Pero fue la región que más restringió sus compras. En muchos casos como la
manzana, uva o mandarina enviamos actualmente solo volúmenes mínimos y hemos dejado
de ser un proveedor de cierta importancia.
Europa del Este: también redujo sus compras y su importancia dentro de las exportaciones argentinas. Fue en algún momento el primer destino de las uvas, limones y peras argentinas, pero actualmente Rusia se ha volcado a proveedores más competitivos.
Brasil: es nuestro tercer destino y logró mantener su participación dentro de las exportaciones argentinas.
Latinoamérica (sin Brasil): fue la región que más creció. Los países vecinos, pero también Perú, Méjico, Ecuador, etc están comprand crecientes volúmenes, principalmente peras y manzanas.
Brasil + Otros Latinoamérica: reciben actualmente un 25% de nuestras exportaciones y se ha ubicado luego de Europa, en el segundo lugar.
EEUU + Canadá: es la otra región que está adquiriendo importancia, duplicando casi su participación como destino argentino. Se han mantenido o hasta crecieron los envíos de peras y manzanas, a lo que se suman los arándanos, cerezas y recientemente los limones.
Perspectivas 2019
No es fácil reconquistar mercados. Los competidores, como es Perú, Sudáfrica o Chile, han ocupado rápidamente los espacios cedidos por Argentina. En muchos casos son más competitivos, lo que hace muy difícil superarlos. A esto se suma que también las producciones del norte extendieron su campaña (por nuevas variedades, otras regiones productoras, mejoras en almacenamiento) empezando a ocupar lugares donde antes solo se disponía de fruta de contraestación. A esto se suma que los compradores se tornaron más exigentes, sea en lo que respecta calidad, tamaño, sanidad ó certificaciones. Estas mayores exigencias se enfrentan a una fruticultura argentina en la cual muchos productores no pudieron mantenerse actualizados y hoy cuentan con una producción “anticuada” (variedades viejas, menores rendimientos, problemas de tamaño y sanidad). La fruticultura actual exige un alto nivel tecnologico y una constante renovación, ambos factores que no se cumplen en ciclos negativos. En algunas especies la falta de fruta exportable se hace notar, como es el caso de la manzana.
La campaña 2019 se presentó difícil. A las razones enumeradas se sumó una supercosecha en Europa que restringió el interés en las peras, manzanas y limones australes. Cayeron marcadamente los envíos a dicho destino. Se trató de compensar con mayores envíos a otros destinos, pero solamente parcialmente se pudo compensar la merma surgida por Europa. Por este
motivo este año se exportará menos peras, manzanas y limones. Al ser las 3 principales frutas exportadas por Argentina, se reducirá la exportación global. En caso de los cítricos dulces seespera una cierta recuperación luego de la fuerte baja sufrida el año pasado debido a problemas climáticos. En caso del arándano la situación de los mercados externos se está complicando ante el rápido avance de países más competitivos, por lo cual estimamos que la exportación se ubicará cercana a la de otros años. En cerezas se espera que sigan creciendo dado que los mercados continúan demandándola, aunque todo dependerá de cómo viene la cosecha de este año.
También la exportación de uva se está recuperando lentamente. Pero a pesar de esto sus envíos se mantendrán en niveles relativamente bajos, muy lejos de los de los años de gloria.
Estimamos que el total exportado se ubicará cerca de las 770.000 toneladas, esto significaría un 5% menos que en el 2018 cuando se alcanzaron las 808.000 tons, y un 3% más que en el 2017.